¿Te ofrecieron un plazo fijo de alta rentabilidad y ahora no puedes recuperar tu dinero? ¿Nadie te dijo que tu capital no estaba garantizado?
Las preferentes y la deuda subordinada ya han sido condenadas por los tribunales (preferentes y deuda subordinada), los primeros afectados fueron los que invirtieron, sin saberlo, en Lehman y en los bancos islandeses (Landsbanki). Ya hay miles sentencias que condenan a entidades españolas (Bankia, CEISS, Banco Santander) por la comercialización de preferentes o deuda subordinada sin la correcta información al cliente.
Como siempre, contaremos con los mejores profesionales para defender a nuestros asociados y con la mejor estrategia procesal: la demanda individual.