En 2007 y 2008 las entidades financieras colocaron hipotecas indexadas en yenes (JPY) o en francos suizos (CHF) bajo el reclamo de pagar menos intereses. Sin embargo, no advirtieron de que toda la deuda quedaría indexada a la moneda elegida por lo que la deuda aumentaría o disminuiría en función de la cotización del Euro.
ASUFIN es pionera en la defensa de las hipotecas en divisas, por eso, 4 de cada 10 afectados confían en nosotros para llevar su defensa. Comenzamos la batalla en 2013, presentando la primera demanda redactada por socios fundadores de nuestra asociación y llegando al Tribunal Supremo en 2017 cuando se dictó la primera sentencia dando la razón a los afectados. Actualmente más del 90% de las sentencias son favorables al consumidor.