Bajo el reclamo de ser un préstamo hipotecario ideal para parejas jóvenes, Banesto (ahora Banco Santander) colocó un crédito hipotecario con consecuencias perniciosas para los suscriptores: un elevado tipo fijo durante 10 años, una amortización de capital mínima en los primeros años, la posibilidad de que el capital pueda elevarse sobre el inicial y de que la duración del préstamo no esté determinada son sólo algunas de las características que fueron ocultadas por la entidad.
Ante el alud de reclamaciones, la entidad ofreció novaciones que tampoco suponían una mejora sustancial del contrato: si bien retiraba el tipo fijo, nunca devolvió las cantidades abonadas de más y, en muchas ocasiones, incrementó el diferencial aplicado. Unas condiciones que, además, obligó a firmar con expresa renuncia a posteriores acciones legales en muchos de los casos. Numerosos afectados, ante la imposibilidad de seguir pagando las altas cuotas de la hipoteca, aceptaron la oferta.
ASUFIN, después de que sus servicios jurídicos estudiaran decenas de casos, presentó una demanda colectiva que ganamos en primera instancia en septiembre de 2018. También hemos presentado demandas individuales y estamos publicando todas las sentencias que se están consiguiendo en los tribunales. No te conformes, ¡podemos recuperar tu dinero!