Las redes sociales se han convertido en un pilar esencial de nuestras vidas, en ellas lo compartimos todo. Aplicaciones móviles como WhatsApp, Facebook, Instagram o Twitter son usadas a diario por millones de usuarios, de todo el mundo. Según una encuesta realizada en 2017 el 86% de la población española utiliza alguna de estas plataformas.
Por eso los delincuentes informáticos acuden cada vez más frecuentemente a estos sitios web en busca de sus nuevas víctimas. Generalmente, se centran en un perfil determinado, los conocidos como «influencers» son sus víctimas favoritas porque tienen muchos seguidores y ganan dinero directamente de la aplicación o promociones, pero todos podemos sufrir este tipo de ataques.
Al igual que en muchas otras estafas por internet, los hackers se hacen pasar por el soporte técnico y te piden que verifiques tu cuenta y contraseña, esta práctica se conoce como phishing, y al hacer clik en el enlace accedes a un sitio web que imita tu interfaz oficial de usuario. Después, el delincuente cambia la contraseña y toman posesión de tu cuenta y tus datos. Por último, se ponen en contacto con la víctima y exigen algún tipo de pago para recuperar la cuenta.
Pero los usuarios podemos defendernos: En primer lugar, es importante que actives la función de doble autenticación, pues de esta forma, aunque un tercero disponga de la contraseña sin un código de seguridad adicional o con un acceso extra no podrá entrar. Nunca abras enlaces de sitios desconocidos, y asegúrate que quien te escribe es la web oficial. Utiliza programas para detectar URL maliciosas ocultas en los correos electrónicos, web y archivos. Y, por último, instala un antivirus para que no puedan acceder a través de una brecha en la seguridad de tu dispositivo.
Volvemos a ganar la multidivisa en el Supremo y recuperamos 310.000€ para nuestros socios
El Supremo corrige a la Audiencia de Barcelona y reitera que la multidivisa se colocó de forma abusiva
Edificios a partir de basura: ahorra y cuida el medio ambiente
Descubre cómo puede pasar de ser basura a ser material de construcción de edificios e infraestructuras.
El Supremo devuelve la comisión de apertura al «caso por caso» y tergiversa el criterio del TJUE
Establece que el coste de la comisión examinada está “dentro de la media” y señala que hasta el 1,5% está “en mercado”