ASUFIN, como miembro de la prestigiosa ONG Finance Watch, contribuye a la defensa de los usuarios también a nivel europeo. Esta unión, en palabras de Patricia Suarez, presidenta de ASUFIN, nos hace más fuertes:
Formar parte de una organización como Finance Watch nos hace más fuertes. Gracias al soporte técnico -jurídico y financiero- podremos defender mejor a los consumidores españoles y europeos. Además, mejoraremos nuestra capacidad de influencia en las Instituciones europeas, analizaremos las reformas legislativas y propondremos reformas dentro de una organización fuerte y solvente como es Finance Watch.
Patricia Suárez
ASUFIN gracias a esta alianza, firmó una carta dirigida a la presidenta del Banco Central Europeo (BCE) a llevar a cabo acciones concretas de sostenibilidad de las finanzas durante su mandato. Patricia Suárez considera que “el Banco Central Europeo debe pasar de las palabras a los hechos contra el cambio climático. La sociedad civil necesita un BCE que haga que las finanzas sirvan al planeta”.
La banca conocedora de la preocupación sobre el cambio climático de una gran parte de la sociedad, está ofreciendo y lanzando al mercado nuevos productos hasta ahora inexistentes. Muchas entidades tienen ya entre su catálogo de productos los denominados ecopréstamos. Este tipo de préstamos que, además de otorgarse a proyectos respetuosos con el medioambiente ofrece en ocasiones, intereses y condiciones más favorables que otro tipo de préstamos.
Los ecopréstamos están pensados para la compra de bienes respetuosos con el ecosistema (compra de electrodomésticos de bajo consumo, mejora de eficiencia energética del hogar o de una empresa, instalación de paneles solares o la compra de un coche eléctrico, entre otros) o para la creación de nuevas empresas que beneficien al medio ambiente y que contribuyen con su actividad al cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible de la Naciones Unidas (recogida de residuos, huertos urbanos, medio de transporte alternativos, etc.).
Algunas entidades también ofrecen hipotecas cuyo diferencial de partida es bajo y que va aumentando a medida que empeora la certificación energética de la vivienda.
Este tipo de productos evidencian como la banca es consciente de la necesidad de fusionar sostenibilidad y finanzas puesto que el futuro más inmediato requiere de medidas concretas si se quiere luchar contra el cambio climático siguiendo las recomendaciones de la Naciones Unidas.