Asuapedefin consigue la nulidad de un swap que había sido validado en primera instancia. Bajo la dirección letrada de Patricia Gabeiras, se ha logrado que la Audiencia Provincial de Barcelona revoque la sentencia y falle en favor de los afectados.
Los afectados eran un matrimonio barcelonés que había visto como el swap que contrataron como «seguro de cobertura» frente a la subida de tipos les había llevado a perder cerca de 5.000 euros en apenas cinco años. Curioso balance para tratarse de un seguro. El caso llegó a los tribunales con mal pie: el juzgado de primera instancia número 5 de Barcelona había desestimado la primera demanda presentada pidiendo la nulidad del contrato. El juzgado consideró que la desinformación a la hora de la firma era también imputable a los clientes, entendiendo que no habían actuado con la diligencia mínima exigible.
Los afectados decidieron apelar esta sentencia con la asistencia de Asuapedefin, y el caso ha tomado un nuevo rumbo en la Audiencia Provincial. La sección decimosexta de este órgano ha considerado los argumentos planteados en el recurso y ha fallado estimando la demanda de los clientes. En la sentencia se alude a la enorme complejidad del sistema financiero, que genera una situación de absoluta desigualdad entre las partes contratantes -entidad bancaria y particulares-. Para suplir esta situación de indefensión, la Ley del Mercado de Valores obliga a los bancos a evaluar el nivel de conocimientos del cliente y a ofertar exclusivamente productos adecuados a sus intereses. Se habla de un deber de asesoramiento al cliente minorista, que juega fuera de casa.
Este deber de asesoramiento al cliente en aras de su interés, como tónica general, brilla por su ausencia en la mayoría de los casos de swaps. Bankinter es un claro ejemplo de reincidencia en la colocación de estos productos a consumidores desprotegidos. Su práctica más reiterada ha sido la de colocar los swaps como seguros ligados a préstamos hipotecarios. Los clientes acudían a pedir el préstamo y los empleados les obsequiaban con lo que definían como «seguro de cobertura». Estos supuestos seguros se comercializaban bajo la denominación de ‘clip’, y eran en apariencia absolutamente gratuitos.
Los problemas llegaban cuando se producían las bajadas de tipos, y las liquidaciones comenzaban a ser negativas. Entonces los clientes comprendían la verdadera naturaleza del producto. Y entonces aparecían las comisiones: las de cancelación anticipada solía ser desorbitada, para evitar la anulación del mismo. De esta forma, cuando la crisis originó la bajada generalizada de los índices de referencia, con los consiguientes devengos negativos, el cliente quedaba aislado y con la única posibilidad de tener que pagar, por un lado o por otro. Por suerte, muchos casos terminan resolviéndose en la vía judicial de forma favorable para los afectados.
Dirección letrada: Patricia Gabeiras Vázquez
Banco: Bankinter
Producto: Swap
Perfil: Particular / Abogado
PDF: S_140415_BANKINTER_AP16_BARCELONA_REVOCA_121113_JPI5_BARCELONA_ASUAPEDEFIN_ABOGADO_SIN.pdf
