El MIT ha diseñado un nuevo brazo robótico con sensibilidad suficiente para poder seleccionar y clasificar residuos en el proceso de reciclaje.
Se ha creado una nueva generación de robots que ayudarán a reducir el impacto de las actividades industriales en el medioambiente. La propuesta la ha llevado a cabo el laboratorio de ciencia computacional e inteligencia artificial del MIT en EEUU, y consiste en un innovador brazo robótico con capacidad para seleccionar, levantar y desplazar materiales destinados al reciclaje.
El nombre de este brazo robótico es “RoCycle” y funciona gracias a un sistema articulado, a unas pinzas blandas y, unos sensores táctiles de los que dispone, puede distinguir entre residuos de papel, metal y plástico, depositando cada uno en su lugar correspondiente.
El reto de los investigadores es perfeccionar su tecnología, ya que en las pruebas realizadas hasta la fecha, el brazo robótico tiene un porcentaje de éxito de un 83% en el caso de objetos estáticos y del 63% en entornos en movimiento. Un posible avance sería añadir cámaras que complementen a los sensores con imágenes en vídeo para facilitar así la actividad.
Además de las capacidades de los robots para identificar los objetos, cuenta con un sistema de inteligencia artificial de aprendizaje profundo que le permite determinar el tipo de objeto que ha recolectado, así como la trayectoria que describe en un lanzamiento para así llegar a tener un 100% de porcentaje de éxito.
¿Tu tren se retrasa o cancela? Estos son tus derechos y cómo reclamarlos
Las incidencias ferroviarias pueden afectar seriamente tus planes de viaje.
Anulamos un suelo para nuestro socio que imponía un 2,5% de interés a su hipoteca de Euribor + 0,60%
El suelo se gana en los tribunales; si aún tienes esta cláusula en tu hipoteca, y aunque la hayas cancelado, estás a tiempo de recuperar el dinero que te pertenece, ¡reclama con nosotros!
Los minicréditos disparan su coste, en tiempos de bajadas de tipos
Los que se piden a dos meses, suben su precio más de un 200%, y los más comunes, a 30 días, un 138%, y se acercan a los máximos de 2021, cuando la pandemia encareció esta modalidad rápida de obtención de efectivo