Al problema de la ludopatía se suma el problema de su salud financiera
Los jugadores tienen fácil acceso al crédito, con tarjetas o con paypal, gastando un dinero que no tienen para seguir apostando
Miércoles, 15 de enero de 2020. El Regulador británico del juego ha tomado la decisión de prohibir a partir del 14 de abril el uso de tarjetas de crédito en apuestas y juegos de azar, que afectará tanto a los servicios ‘online’ como los ‘offline’. Una iniciativa que, en opinión de ASUFIN, va en la buena dirección y debe ser tenida en cuenta por el nuevo Gobierno constituido en nuestro país.
Alberto Garzón, que estrena Ministerio de Consumo con competencia específica en la protección de los consumidores y de juego, debe poner en marcha medidas que atajen la espiral de deudas de muchos jugadores que emplean la vía del crédito para continuar apostando y, con ello, sobre-endeudarse.
La decisión del Regulador británico ha sido tomada tras una consulta pública en la que industria y consumidores estaban de acuerdo. La complejidad del problema de la ludopatía no debe olvidar las consecuencias económicas para los afectados.
Además, la posibilidad de pagar a crédito estos servicios atenta contra la idea de “préstamo responsable” consagrada en la Ley de Economía Sostenible hace casi una década, que establece que “las entidades de crédito, antes de que se celebre el contrato de crédito o préstamo, deberán evaluar la solvencia del potencial prestatario, sobre la base de una información suficiente. Asimismo, llevarán a cabo prácticas para la concesión responsable de préstamos y créditos a los consumidores”. Esta idea coincide plenamente con el Proyecto de Orden sobre tarjetas revolving, a la que ASUFIN ha aportado propuestas en la consulta pública, y cuya aprobación se prevé en las próximas semanas.
Patricia Suárez, presidenta de ASUFIN, ha manifestado su confianza en “que el nuevo Ministro, economista de formación y cuya preocupación por el juego fue una de sus primeras manifestaciones tras su nombramiento, ponga en marcha una consulta pública para que este tipo de medidas se adopten lo antes posible.” y añadió que, como patrona de Finsalud “soy muy consciente del impacto que una mala salud financiera puede tener en la salud física y mental de las personas, por lo que el problema de las apuestas debe abordarse desde todos los ámbitos que afectan al jugador y sus familias.”