Desde ASUFIN te enseñamos 5 ideas de ahorrar agua para salvar el planeta y ayudar a tu bolsillo.
El agua es el bien más preciado del planeta, por ello, su uso y disfrute debe de hacerse de una forma sostenible. Además, reducir el consumo de agua puede suponer un gran beneficio para la economía de nuestro hogar. Desde ASUFIN te mostramos 5 consejos para ayudar al mundo y a tu bolsillo.
- Dúchate en vez de bañarte: Sabías que por regla general la bañera gasta alrededor de 15 veces más de agua que la ducha. Además, según la OMS una ducha de 5 minutos es lo ideal para que el ahorro tanto de dinero como del recurso sea efectivo.
- Cierra el grifo: En nuestro día a día abrimos el grifo en numerosas ocasiones, y a veces podemos estar gastando más de la imprescindible. Por ello, es importante cerrar el grifo mientras nos lavamos lo dientes, lavamos los platos, te enjabonas las manos o te afeitas. Si desde que te empiezas a lavar los dientes hasta que terminas dejas el grifo abierto gastas alrededor de 6 litros de agua, mientras que si solo lo usas cuando es necesario gastas algo menos de medio litro.
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- Lava a carga completa: Muchas veces utilizamos los electrodomésticos antes de que estén llenos. Por ejemplo, el consumo de la lavadora suele suponer el 20% de nuestro consumo total de agua en casa, por lo que, si esperamos a que llenarla reduciremos no solo el consumo de agua, sino que también el de electricidad. Lo mismo sucede con el lavavajillas. Recuerda que los programas de prelavado o enjuagar los platos antes de meterlos en el en el lavavajillas son procesos innecesarios que tan solo malgastan los recursos.
- Regar las plantas: Si tienes plantas en casa o jardín te recomendamos que las riegues por la noche, ya que si riegas durante el día casi el 30% del agua se acaba perdiendo a causa de la evaporación. De esta forma necesitarás menos litros lo que supondrá una reducción notable en tu factura del agua.
- Elige electrodomésticos más eficientes: Si te estás pensando cambiar los electrodomésticos plantéate comprar aquellos más eficientes energéticamente. Son inicialmente más caros, pero consumen menos energía y menos agua. Aquellos, etiquetados con la letra A son los más recomendables.
